Todos los nombres
Algunos aún no se han dado cuenta de que llevan el uniforme y las armas reglamentarias. Otros sienten pánico al mirarse al espejo, pero los más asumen con orgullo su nueva condición de soldados de fortuna y acuden al frente con paso firme y decidido. Están bien aleccionados. Con un solo gesto alzan el dedo acusador y aprietan el gatillo. Quieren nombres. Exigen nombres y apellidos a todo aquel que ve fantasmas donde sólo existe un “grupo de amigos y amigas” unidos por su amor a (la Junta de) Extremadura. Pero ese amor es enfermizo, patológico... y sólo se demuestra siendo ciego, sordo y mudo ante los crímenes de la amada. El delito no importa. Lo importante es el nombre del delator.
Así, con nombres y apellidos, ahogaron la voz irreverente de Manuela Martín, que, semana tras semana, iluminaba la blogosfera sin saberlo con sus acertados análisis de la Extremadura Política. Pero la lectura más inteligente del Hoy no se ajustaba a los cánones informativos del césar. Ya se sabe: las críticas, por muy constructivas que sean, no interesan a las abuelas. Y menos aún si faltan pocos meses para las elecciones...
Tras “aparcar” a Manuela en los pasillos del Hoy (si es que sigue ahí) y mucho presionar a los medios, el césar impuso sus condiciones. Algunos tan sólo se ajustaron la mordaza. Otros se la colocaron a regañadientes... casi todos han claudicado. Ahora preparan el asalto final a la blogosfera, pero se enfrentan a un enemigo invisible al que es difícil infundir el miedo y necesitan sus nombres, por eso quieren todos los nombres...
Publicado en (con comentarios): http://extremadurausente.blogspot.com/
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