Seguimos con los malos olores

COMUNICADO DE PRENSA 

 

11 de septiembre de 2006

Seguimos con los malos olores

En los últimos días los malos olores han vuelto a adueñarse de las calles de Almendralejo, obligando a los ciudadanos que habitan en algunas partes del pueblo, a mantener cerradas puertas y ventanas para evitar el olor pestilente. Teniendo en cuenta que en esta época del año, el interior de las viviendas puede llegar a sobrepasar los 30º y que no todos los ciudadanos poseen aire acondicionado, es fácil imaginar lo difícil que les habrá resultado conciliar el sueño.

El equipo de gobierno, en la línea de anteriores declaraciones, mantiene que en este caso son debidos al inicio de la vendimia y a todo lo que esto lleva aparejado. Otra vez peca de inconcreto, y al parecer el fin con que se hace esta declaración es el de difuminar responsabilidades para que así los incumplidores queden sin identificar y por tanto impunes.

Al parecer los únicos que, a pesar de los medios con los que cuentan, no tienen claro quién está produciendo esto malos olores son nuestros gobernantes municipales, cuando todo el mundo en el pueblo sabe perfectamente que industria es la responsable, sino de todos, de gran parte de ellos. Esta industria se llama VINIBASA, la planta de tratamiento de residuos vínicos, llamada popularmente alcoholera.

Esta industria tiene un historial que es digno de mencionar. En el año 2004 la Consejería de Industria, debido a las protestas de los ciudadanos, efectuó tres comprobaciones de emisiones en la empresa. El resultado fue un incumplimiento claro de la ley vigente, pues se sobrepasaban los niveles de emisión máximos permitidos en todos los compuestos analizados, llegando a triplicar este máximo en alguno de ellos. A pesar  de esta infracción no tenemos noticias de que se le haya impuesto la sanción correspondiente, ni que se hayan efectuado controles de emisiones posteriores. Parece como si atentar contra el aire de todos no fuese motivo de actuación, suponemos que debe ser porque quién debe velar por el patrimonio presupone que no es de nadie.

En reiteradas ocasiones la Plataforma ha solicitado mediante escritos al Ayuntamiento que tome las medidas oportunas para que la industria deje de efectuar actividades para las que no tiene licencia. Solamente después de más de dos años el Ayuntamiento solicitó a la industria que tomase medidas para evitar que en proceso de predepuración se emitiese olores pestilentes. Debemos recordar por enésima vez que la industria no tiene licencia para efectuar este proceso, licencia que solicitó hace más de tres años y que el Ayuntamiento no ha concedido todavía. Pero lo que es más grave, en un medio de comunicación el Sr. Bote, Concejal de Urbanismo, afirmó que la instalación de predepuración carecía de licencia de obras, sin embargo, esta actividad se ha venido efectuando durante, al menos los últimos tres años. Hasta el día de la fecha no tenemos noticias de que el Ayuntamiento haya abierto expediente por efectuar una actividad sin licencia y por construcción clandestina. Nos tememos que no se habrá abierto ninguno, y nos preguntamos el porqué. 

Esta industria está incinerando miles de toneladas de residuos (orujo agotado de uva) dentro del casco urbano, emitiendo así gran cantidad de partículas, y cantidades indeterminadas de dioxinas, furanos, y compuestos bioacumulables, entre otros.

Mantiene, incumpliendo la ley de Residuos, unos grandes montones de orujo agotado, que utiliza como combustible, que al fermentar y ser removidos producen un olor nauseabundo.

El Ayuntamiento, con el Sr. Alcalde a la cabeza, siempre ha defendido a la industria infractora, llegando a insultar a los miembros de la Plataforma calificándolos de “talibanes ecologistas e ignorantes”, y  afirmando que lo habían amenazado, por el simple hecho de haberle comunicado por escrito que acudirían a los tribunales si no hacía cumplir la ley. El Sr. Alcalde quiere hacer creer a los ciudadanos que el estado de contaminación que sufre el pueblo es debido a las actividades que se realizan, dando a entender que las molestias que causan son inherentes a estas actividades y que, por lo tanto, los ciudadanos deben aguantarlas con resignación.

La Plataforma considera que esto no es cierto y para demostrarlo vamos a recurrir al ejemplo de Villarrobledo, pueblo de la provincia de Albacete con alrededor de 25.000 habitantes; uno de los mayores productores de vino y que también está sufriendo los problemas de contaminación que sufre Almendralejo. La gran diferencia es que en este pueblo ha sido el Ayuntamiento, con el Sr. Alcalde, D. Pedro Antonio Ruiz, a la cabeza, el que ha convocado a todas las fuerzas sociales y asociaciones y han creado  la denominada “Agrupación Ciudadana Contra la Polución y los Malos Olores de Villarrobledo”. El Ayuntamiento ha facilitado las instalaciones municipales y ha repartido hojas para recoger firmas, siendo el primero en firmar el Sr. Alcalde del municipio. Con las 4500 firmas recogidas, el Alcalde junto con el Concejal de Agricultura y Medio Ambiente, se personaron en la delegación de Medio Ambiente, en donde se entrevistaron con el delegado y le solicitaron el cierre cautelar de una fábrica de alcohol.

¡Qué diferencia con el comportamiento del Sr. Alcalde de Almendralejo!, que comunicó a los miembros de la Plataforma, cuando estaban en el proceso de recogida de firmas, que a él le daba igual, que “no tenían ninguna validez, que la gente firma para cualquier cosa”. No sabemos que habrá pasado con las más de 3100 firmas que entregamos en el Ayuntamiento.

Vemos pues, dos comportamientos diferentes antes un mismo problema. Los dos alcaldes son del PSOE, por lo tanto este comportamiento no se puede achacar a diferencias ideológicas, por lo que tendremos que acordar que los mismos son debido a personalidades diferentes, y diferentes prioridades a la hora de actuar.

Queremos invitar a los ciudadanos a reflexionar, teniendo en cuenta los dos comportamientos anteriormente expuestos, sobre quién creen ellos que es el alcalde que defiende los intereses generales de los ciudadanos, y cuál el que defiende los intereses particulares de unos cuantos.

Nos gustaría que el Sr. Alcalde de Almendralejo meditase también sobre el tema, y esperamos que después de hacerlo cambie de actitud enfrentándose, no a los ciudadanos que exigen que se cumpla la ley, si no a los que de forma impune las incumplen con su inestimable colaboración por omisión.

11 de septiembre de 2006

Plataforma Contra la Contaminación de Almendralejo 

 

Saludos,

Plataforma Contra la Contaminación de Almendralejo

 

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